Tras las elecciones municipales, una cosa ha quedado clara, el PP ha perdido el apoyo de la mayoría de los pinteños y se encuentra ante la pérdida de la alcaldía inminente, tras una gestión con verdaderas lagunas y una actitud de poca escucha y compromiso con una ciudadanía golpeada por la crisis.
Ganemos, coalición de fuerzas de izquierda y movimiento sociales, pese a haber conseguido menos votos, se encuentra con el mismo número de concejales y la oportunidad de gobernar. Para lograrlo necesita dos cosas, el apoyo del PSOE e incumplir el primer punto de su programa: no gobernaremos si no somos la fuerza más votada.
El PSOE se ha convertido, con cinco concejales, en la llave de la gobernabilidad de Pinto, situación que se repite también en Madrid y ante la que debe demostrar su capacidad política y valorar si pone antes su compromiso con las fuerzas de izquierda que conseguir una puerta fácil a puestos directos en el gobierno municipal. La decisión del PSOE va a decirnos mucho de su visión de futuro o de sus ansias de poder cortoplacista. Hay voces que reclaman un apoyo incondicional a la candidatura de Rafael Sánchez y hay quienes exigen un pacto de gobierno completo.
Afirma el PP que está «todo el pescao vendido», que el pacto es un hecho, que todo ha sido una farsa y que, al final, no son mejores que ellos y harán cualquier cosa por conseguir echar a Rabaneda y su equipo y repartirse el botín.
Aparte de estas opiniones de carácter fuertemente partidista, la realidad es esta. Ganemos solo puede gobernar Pinto si incumple su programa. Pero Ganemos tiene la oportunidad de llevar el resto de su programa a Pinto y demostrar que sus propuestas, fuertemente sociales y participativas, son realistas, positivas y eficaces.
Ganemos tiene ahora la primera palabra en este Juego de Tronos Pinteño. Los Lannister han perdido el Trono de Hierro y se tambalea el gobierno de los más ricos. Los norteños Stark se han unido al Pueblo Libre y forman una coalición que, de todos modos, no tiene el camino sencillo para recuperar lo perdido en estos años. ¿Están dispuestos a aceptar cualquier apoyo para lograr su objetivo?
Mañana, en Asamblea abierta, Ganemos decidirá sus condiciones. Todo apunta a que están dispuestos a valorar romper su primer punto del programa, aceptando que fue un error, y asumir la responsabilidad de llevar a cabo el resto de sus propuestas. Pero sabemos que el PSOE los tentará, y quizá, solo quizá, se negara a votar por Rafa Sánchez como alcalde si no reciben a cambio abundantes tierras, riquezas y honores.
Mañana, Ganemos, decidirá de manera transparente, que va a pedir. ¿Pacto? ¿Negativa a gobernar al no ser la fuerza más votada pese a ser evidente que el PP no cuenta con sufriente apoyo? ¿O solamente aceptarán la responsabilidad con un apoyo sin condiciones del PSOE negándose a sentarlos en el gobierno municipal?
Sus bases votarán diferentes propuestas. ¿Conseguir el poder a cualquier precio o mantener una línea independiente y rechazar las tentaciones del PSOE?
Hace ocho años nos encontramos con una situación en la que un partido perdió su credibilidad cuando aceptó un pacto. Y ahora, se acerca el Invierno.
Ganemos tiene que preguntarse mañana una cosa trascendental: ¿Qué quiere el pueblo de Pinto que hagan? Pase lo que pase, estará bien, es su decisión democrática. Sus propuestas son una promesa de Primavera, pero quizá pierdan su credibilidad en el camino.
Y deben saber una cosa: «The North Remembers».
M.Long
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